Compuesto por tres diferentes núcleos urbanos, unidos para dar lugar a un municipio donde la belleza andaluza se mezcla con el encanto árabe. Si tenias pensado acercarte a Málaga, no podrás irte sin pasear por alguno de sus rincones más encantadores.
A poco más de 10 km de la localidad de Mijas, se encuentra Benalmádena. Te recomendamos acercarte a este municipio, que dispone de un casco histórico puramente andaluz, encalado, de calles estrechas, plazas y miradores. En esta zona se pueden visitar la iglesia de Santo Domingo, del siglo XVII, el parque de la Paloma y el castillo de Colomares, con un monumento que homenajea a Cristóbal Colón y el descubrimiento de América.
Sus núcleos urbanos, Benalmádena Pueblo, Benalmádena Costa y Arroyo de la Miel forman un paisaje único gracias a su gran contraste. Arroyo de la Miel es la zona más moderna, surgida tras la reconquista; mientras que Benalmádena de la Costa es la urbe más turística de playa y sol, Benálmadena Pueblo es la típica villa andaluza.
En este último rincón es donde encontraremos el mágico Castillo de Bil-Bil. A pesar de que es de construcción árabe, con un impresionante rojo en su exterior y decorado con azules y bajorrelieve, siguiendo la tradición nazarí, fue edificado en 1927. Paseando por sus alrededores encontraremos impresionantes jardines con diversas fuentes de inspiración árabe. En sus inicios pertenecía a una familia adinerad de la zona, pero hoy día es sede de exposiciones, conciertos y conferencias, además de ser el edificio público donde más bodas civiles se han celebrado en Málaga
Con un paisaje así, ¡quién se resiste a una escapada por Málaga!